martes, 12 de junio de 2012

RESUMEN FRANQUISMO


Os dejo el resumen de la unión de las dos partes del franquismo que vimos en clase. Mucho ánimo para esta recta final. Para cualquier duda final podréis encontrarme en el instituto. Suerte!!!

EL FRANQUISMO

INTRODUCIÓN

Tras el fin de la guerra civil, comenzó una de las etapas más largas de la Historia de España. El general Franco ejerció el poder desde 1939 hasta su muerte en 1975.
Dentro de los muchos aspectos que se pueden señalar hay 6 grandes ideas presentes en todo el régimen.
  • Una ideología inspirada en la Falange, que llevó aparejada la prohibición de otros partidos políticos.
  • Una religión y enseñanza católica, sin concesiones al resto de credos.
  • Una sola información derivada de la prensa oficial y los púlpitos de las iglesias.
  • Una cultura y un arte alejados de asuntos políticos o morales.
  • Una sociedad sumisa, con miedo al estallido de cualquier tipo de conflictos.
  • Un estado centralista que identifica la Historia del país con el imperio español, suprimiendo las autonomías.
 Pese a ello, en tan largo periodo, el país sufre una evolución que marcan las características de cada una de las fases en que se divide este régimen. Casi todos los autores coinciden en la división cronológica de las etapas aunque no en la denominación de las mismas. En todo caso para facilitar el estudio del tema, podríamos hablar de:
-Periodo azul o fascista (1939-1943)
-Periodo de aislamiento y superación (1944-1958).
-El desarrollismo (1959-1970)                                                            
-Franquismo final (1971-1975).

FUNDAMENTOS IDEOLÓGICOS Y BASES SOCIALES. LAS INSTITUCIONES

El general Franco había labrado su carrera militar incorporándose al ejército en África en 1912. Allí destacó por el valor concedido a la disciplina y a la austeridad de sus costumbres lo que le sirvió para ascender hasta llagar al mando principal de la Legión.
La proclamación de la Republica no la acogió con entusiasmo. De ideas conservadoras, anticomunista, destaca por su nacionalismo a ultranza y por un fuerte sentimiento religioso lo que le generó enfrentamientos con el gobierno republicano (salvo en el periodo del bienio negro).
Tras el fin de la guerra será proclamado caudillo y será el encargado de desarrollar los soportes de la dictadura. Para entender su larga duración en el poder hay que tener en cuenta…
A- La habilidad con la que mantuvo el equilibrio entre las diferentes “familias” de los grupos conservadores para seguir contando con su apoyo y fidelidad durante todos esos años.
B- La colaboración con la Iglesia, los latifundistas, el ejército, la Falange y los partidos de derechas (incluidos los monárquicos, si bien con el paso del tiempo los seguidores de Juan de Borbón intentaron restaurar la monarquía).
C- El miedo de una población que aceptó el régimen antes de repetir u nuevo conflicto bélico.
En lo referente a su ideología, se construye en base a la formación del partido único (FET-JONS) similar a los partidos fascistas que marcará la orientación política entre el 39 y el 43. Está recogida en los “27 puntos de la Falange” y en el “fuero del trabajo”. Entre dichos puntos se encuentra: la exaltación del nacionalismo español, rechazo al sistema liberal y democrático, intervención del Estado en economía, el uso de símbolos típicos de los regímenes fascistas (saludo, uniformes, eslóganes, imágenes..) y el reconocimiento incuestionable de la figura de Franco como Caudillo quien además ejerce la tarea de gobierno a través de ministros que nombraba libremente. Además, a modo de órgano asesor, crea el Consejo Nacional con integrantes también designados por Franco y con función consultiva. En las provincias, designa a un representante del gobierno, el gobernador civil, responsable de todos los asuntos en su zona geográfica.
En cuestión social se suprimieron los sindicatos obreros y el gobierno creó los sindicatos verticales (afines al régimen, formados por empresarios y trabajadores). El gobierno fijaba los salarios, prohibía las huelgas y dificultaba el despido. A partir de 1941 comienza a planearse un sistema de Seguridad Social que culminará en la década siguiente.
Tras 1945, el régimen trató de despojarse de los signos de carácter fascista y buscó una nueva base ideológica: el nacionalcatolicismo. Consistía en una alianza del régimen con el catolicismo de talante más tradicional. Esta alianza culminaría en 1953 con la firma del concordato con la Santa Sede. Como primer signo de este cambio que buscaba asegurar la continuidad del régimen tras la II Guerra Mundial, se forma un nuevo gobierno más próximo a la democracia cristiana europea. Buscaba romper el aislamiento con el exterior reanudando relaciones diplomáticas.
Tras 1951 sube al poder Carrero Blanco, profundamente antiliberal pero muy poco proclive a la Falange. Impulsa una dictadura burocrática y administrativa y sirvió de entrada a grupos relacionados con el Opus Dei.
En materia política se trata de dar una imagen de democracia pero no basada en partidos políticos sino en lo que el régimen llamaba “organismos naturales”: familia, municipio y sindicato. Las Cortes vuelven a funcionar, si bien sólo aprobaban los proyectos de ley enviados por el gobierno. Entre ellas se encuentran:
Fuero de los españoles: declaración de derechos y obligaciones semejantes a las de una constitución pero siguen faltando libertades políticas básicas (derecho de reunión, expresión, asociación…)
Ley de Referéndum: por la que se admite la posibilidad de sufragio universal en el caso de alguna ley que se considere importante.
Ley de bases del régimen local: con ella se define el sistema de elección de concejales (ya que los alcaldes eran nombrados por el gobernador civil). Sin embargo los candidatos tenían que ser “aprobados” por el gobierno.
Ley de sucesión: nombraba a Franco como jefe de Estado vitalicio y con derecho a designar a su sucesor.
En materia social, comienzan a aparecer fisuras en la relación iglesia-Estado. Se abren tendencias al pensamiento católico europeo y se crean grupos católicos obreros. Al mismo tiempo comienzan los primeros atisbos de protesta en la sociedad española con huelgas en Cataluña y el País Vasco exigiendo mejora de salarios y de condiciones laborales. Ante el aumento de los conflictos, el gobierno empezó a modificar la legislación laboral, permitiendo a los trabajadores elegir a sus representantes sindicales.

REPRESIÓN, GUERRILLA Y EXÍLIO

Con la guerra clara, en Febrero de 1939, Franco publicó la ley de Responsabilidades Políticas que consideraba culpables a todos aquellos contrarios al Movimiento Nacional. Esta ley originó una dura represión en la postguerra: la guardia civil y la policía, con ayuda de los falangistas detenía a los sospechosos, los tribunales aceptaban pruebas sin contrastar para juicios que dictaban sentencias condenatorias. Algunos murieron en la cárcel como el poeta Miguel Hernández, otros fueron fusilados como Lluis Company. Hubo declaraciones falsas y muchos inocentes fueron ejecutados. A los que lograron sobrevivir se les aplicó la ley de redención de penas y la realizaron trabajos forzosos como mano de obre barata en obras públicas o conmemorativas (como el valle de los Caídos).
La represión también llegó a intelectuales, artistas, maestros o funcionarios que fueron destituidos de sus cargos. También hubo represión lingüística y moral que eliminaba los cambios introducidos por los gobiernos republicanos.
Para evitar la represión, muchos republicanos emigraron (se estima en torno al medio millón) si bien van a correr distinta suerte según su destino. Los que fueron a Francia en gran parte se integraron en la resistencia, otros fueron posteriormente encarcelados por los alemanes y retenidos en campos de concentración (como el expresidente Largo Caballero).
Otros fueron a México, siendo bien recibidos y desde allí financiaron el gobierno republicano en el exilio. Algo similar ocurre en Londres.
En cuanto a aquellos miembros del PCE que llegaron a Rusia, fueron bien recibidos por Stalin, pero hubo algunos que decepcionados por la realidad del stalinismo acabaron en campos de concentración en Siberia.
En el interior del país, la oposición política fue mínima por el miedo a la represión. Sólo cabe destacar los grupos de anarquistas y comunistas que crearon una guerrilla que recibió el nombre de maquis. En Cataluña llevaron a cabo actuaciones urbanas contra bancos, político, policía o edificios oficiales. En las zonas rurales la guardia civil y el ejército tuvo que ir eliminando una a una las partidas de maquis, de ahí que el movimiento se mantuvo vivo hasta 1955.

LA COYUNTURA INTERNACIONAL

Iniciada la II Guerra Mundial, Italia y Alemania comenzaron sus presiones para que España les prestase apoyo. En principio el régimen se declaró neutral, sin embargo a partir de 1940 se desarrolla la etapa de mayor colaboración con el gobierno de Hitler. Esta política es llevada a cabo con Serrano Suñer como ministro de exteriores y fruto de ella se desarrolla en Hendaya (1940) la reunión entre Franco y Hitler. Alemania pretendía que España cerrase el paso del estrecho de Gibraltar a los barcos británicos. Sin embargo la respuesta fue ambigua y Franco sólo se comprometió a enviar un ejército de voluntarios (la división Azul). Pero con el cambio en la guerra a partir de 1942, la situación comienza a deteriorarse: Franco hace una nueva declaración de neutralidad, se separa claramente de Alemania y propicia el regreso de la División Azul.
En aislamiento y superación…
La victoria de los aliados en 1945 desencadenó una fuerte oposición a los gobiernos que habían colaborado con el eje. Esto se materializó con el no reconocimiento del gobierno de Franco por parte de Inglaterra, Francia y EEUU. También la URSS colaboró para que España no entrara en la ONU. Por otro lado D.Juan en 1945 había publicado el manifiesto de Lausana por el que se defendía una democracia liberal y la superación de las dos Españas. Los monárquicos buscaron el acercamiento tanto a socialistas como al caudillo. Al final se pactó que a la muerte del dictador se instauraría la monarquía pero sería Franco quien designara sucesor.
Además a la presión política se sumó la económica. España queda fuera del plan Marshall. Como respuesta Franco elaboró una imagen de exaltación nacional creando un rechazo hacia lo extranjero.
Pero a partir de de 1948 la situación iba a cambiar. Con el estallido de la Guerra Fría, EEUU busca en Europa aliados. Así propicia el levantamiento del bloqueo, favorece la entrada del país en diferentes organismos que culminarán en 1955 con la entrada en la ONU. A cambio se concedía el permiso a los americanos a instalar bases militares en territorio español.

AUTARQUÍA

En la guerra fueron destruidas gran parte de las infraestructuras, no había reservas de oro y no podían obtenerse capitales ni créditos de otros países debido a la Segunda Guerra Mundial. La producción industrial y agrícola había descendido más de un tercio, lo que produjo un descenso en los niveles de bienestar de la población española. Por ello la década de los 40 fue desastrosa, dominada por la miseria e incapacidad del gobierno para solucionar los 4 problemas inmediatos:
  • El hambre y las malas cosechas
  • La carencia de materias primas y restricciones eléctricas
  • La falta de capitales, tecnología e ideas para reactivar el comercio y la industria.
  • Una creciente inflación y una desordenada política monetaria.
La respuesta gubernamental para todo esto fue una política basada en un rígido control estatal de la actividad económica. Así en agricultura se creó el Instituto Nacional de Colonización (en contraposición con el IRA) que pretendía una mejora de las explotaciones pero sin redistribución de las tierras.
En política industrial, se crea el Instituto Nacional de Industria (INI) mediante el que el gobierno reguló el funcionamiento de las empresas con el control de precios y salarios. Sin embargo esto no impidió la aparición del mercado negro y el mantenimiento de la miseria que trató de atajar mediante el racionamiento de los productos.

En la fase de la autarquía, gracias a la acción del INI, comienzan a desarrollarse las industrias básicas en aquellos sectores donde la iniciativa privada no podía llegar. Nace así ENHER y ENDESA para resolver los problemas de abastecimiento eléctrico; ENSIDESA para la producción siderúrgica y, en colaboración con la FIAT italiana, la SEAT.
Pero el mayor cambio viene en el periodo de superación. Con la entrada de la década de los 50, se produjo un crecimiento de la renta nacional. Dos son los aspectos que explican esto: la ayuda económica norteamericana y el cambio de política económica en 1951.
La situación de la España de finales de los 40 chocaba con la rápida recuperación europea favorecida por el Plan Marshall. Aunque EEUU no incluyó a España en dicho plan, con la guerra fría estableció una serie de ayudas que se plasmaron en las donaciones de alimentos y la concesión de créditos para la adquisición de productos en EEUU (a cambio de facilitar la instalación de las bases militares).
Por otro lado en 1951 se inicia el fin de la autarquía suavizando los controles que habían marcado la etapa anterior. Al mismo tiempo las empresas españolas comenzaron a abrirse al exterior poniendo las bases del crecimiento de la década de los años 60.

EL APERTURISMO INTERNACIONAL Y EL DESARROLLISMO (1959-1975)

En esta etapa del franquismo, el dictador comienza con sus problemas de salud y vivía hasta cierto punto ajeno a las transformaciones que se apuntaban en el país. Los miembros de sus gobiernos cada vez eran más técnicos (tecnócratas) relacionados con el Opus Dei entre los que destaca Carrero Blanco a quien el dictador delegó la jefatura de gobierno en 1973. Buscaron cambiar las pautas de comportamiento político, acercándose en economía a Europa. Sin embargo recelaban de una excesiva liberalización de, ahí que prefirieran el control de la planificación a través de leyes que suavizaban el perfil del régimen a la vez que aseguraron su continuidad. Entre ellas:
Ley de prensa: con ella se produce la desaparición de la censura previa si bien el Estado se reservaba el derecho de inspeccionar las noticias. A pesar de las limitaciones, las publicaciones fueron abriéndose cada vez más.
Ley de libertad religiosa: que aplicaba los principios del Vaticano II
Ley Orgánica del Estado: que marcaba el futuro del país a la muerte del dictador. Señalaba como sucesor a Juan Carlos de Borbón para crear una monarquía continuadora del régimen. Esta elección fue aprobada por todas las familias del régimen, siendo esta una de las últimas decisiones tomadas por consenso.
Pero estos tecnócratas chocaban con otro sector que pretendía el incremento de poder de las bases del movimiento y recelaban de la solución monárquica. Este enfrentamiento hizo que saliesen a la luz pública escándalos como el de Matesa (inversiones públicas poco claras) que salpicaron a políticos próximos a Carrero, si bien Franco mantuvo siempre su confianza en él.
En los años 60 España se incorporó a un importante crecimiento aunque con una generación de retraso respecto al resto de Europa. Esto fue posible gracias al cambio económico impulsado por los tecnócratas encabezados por Ullastres (en comercio) y Navarro Rubio (en hacienda). Conocido como el Plan de Estabilización, consistió en aplicar otras medidas para reconducir la economía del país:
-Reducción del gasto excesivo del Estado y de los particulares (limitando créditos y congelando salarios).
-Relajación de los controles del gobierno sobre la actividad económica
-Apertura de la economía a los mercados exteriores
-Concesión de ayudas a las empresas extranjeras que se instalasen en España
Todo esto contó con el apoyo de créditos internacionales y fue favorecido por dos fenómenos clave para el país en ese momento: el turismo y la emigración.
Pero realmente fue la industria quien sostiene el crecimiento de esta década. La población empleada en este sector crece de forma considerable, permitiendo el aumento en los índices de producción industrial. Esto fue posible gracias a:
  • Mano de obra abundante procedente de la agricultura
  • La activación de capitales no invertidos que junto a los aportados por empresas extranjeras recién instaladas, dieron la posibilidad de afrontar las transformaciones.
  •  Incremento de las importaciones financiadas por capitales extranjeros y por el espectacular desarrollo del turismo además de las remesas de dinero enviadas por los emigrantes.
  • Mantenimiento de la producción agrícola pero con un mejor aprovechamiento de los recursos (agricultura intensiva). Se elevaron los niveles de vida de los campesinos con un cierto crecimiento de sus salarios (motivado por el traspaso de trabajadores a la industria).
Las nuevas zonas industriales abarcaban la zona cantábrica (foco tradicional) y otra más reciente, el litoral mediterráneo. Además de Madrid, otros polos de desarrollo se organizan en torno a ciudades como Burgos, Valladolid, Coruña o Huelva.
En todo este proceso fue fundamental la iniciativa privada aunque el Estado no renunció a su función industrializadota a través del INI.
Pese a todas estas medidas no se pudo propiciar la entrada en la Comunidad Económica Europea (CEE) que se estaba constituyendo, ya que se exigía la implantación de una democracia liberal parlamentaria.

En el contexto social, la era del desarrollismo supuso una rápida modernización que a la larga tendría repercusiones en el terreno político. En demografía se reduce drásticamente la mortalidad (no así la natalidad) por la indudable mejora en los niveles de vida del país. También se consolidan los fenómenos migratorios. En los sesenta y los primeros setenta salen de España hacia distintos países europeos cerca de 1 millón de personas. Pero más importantes serán las migraciones internas: el éxodo rural. Se produce el desplazamiento masivo hacia las ciudades en busca de una vida mejor (casi 4 millones de personas) siendo País Vasco, Barcelona, Madrid y Valencia los principales focos receptores, produciendo un crecimiento (no siempre ordenado) de sus periferias. En general el cambio de residencia implicaba también un cambio de vida en varios aspectos.
La alfabetización avanzó mucho. Se construyen precipitadamente escuelas en los suburbios donde se hacinaba esta nueva población urbana.
Por otro lado la renta per cápita y el consumo, revelan la llegada del crecimiento a la mayor parte de la población (se pasa de los 300$ de 1960 a los 500$ de 1964 y a los 2000$ de 1973. Donde mejor se puede observar el cambio es en el consumo. El coche, los electrodomésticos, el piso…todos ellos pagados a plazos, empezaron a estar al alcance de muchas personas. El cambio fue tan grande que afectó también a la mentalidad y al sistema de valores. En los 70 se habían modificado profundamente las pautas básicas que habían estado vigentes durante siglos.

La oposición tuvo tres motores fundamentales que se fueron sucediendo a medida que pasaba el régimen: el catolicismo, el mundo universitario y la protesta obrera.
El catolicismo en los años 60 comienza una transformación por las ideas del Concilio Vaticano II y la actitud del Papa Pablo VI cada vez más contrario a la alianza entre iglesia y franquismo. El nuevo catolicismo ponía en duda la estructura autoritaria de la iglesia española y defendían un diálogo con las nuevas corrientes de pensamiento. A pesar de las reticencias, las nuevas ideas se fueron imponiendo. Figura clave en este panorama fue el cardenal y obispo Vicente Enrique Tarancón.
En la Universidad se impulsó (en Madrid y Barcelona) la creación de sindicatos independientes de estudiantes. A partir del 65 se habla de agitación estudiantil. En numerosos casos fueron resueltas con la entrada de la policía en la universidad, detenciones, expedientes y expulsiones.
En el ámbito de las protestas obreras el movimiento fue más sólido. Desde el gobierno se promulgó la ley de Convenios Colectivos por la que se reconocía que las negociaciones entre patronal y sindicatos serían llevadas a cabo por sus representantes (y no por el gobierno). Esto llevó a negociaciones cada vez más conflictivas. En 1962 en Asturias, País Vasco y Cataluña se desata la primera oleada de huelgas dirigidas por comisiones de obreros donde había simpatizantes del socialismo, comunismo y las JOC (juventudes obreras católicas). Lentamente el Partido Comunista comenzó a tener notable influencia a través de CCOO y ante ello los obispos disolvieron las JOC. La respuesta del gobierno fue declarar ilegales las huelgas tras 1967.
Paralelamente a esta oposición, en los 60 se perfilan los distintos grupos políticos:
Centro y centro-derecha. Algunas personalidades dentro de la ideología democristiana comenzaron a declararse partidarios de la implantación de la democracia (Gil Robles). Algunos se reunieron en 1962 con miembros de la oposición en el exilio (Contubernio de Munich) de donde salió un documento que exigía un cambio de régimen.
Socialistas. Grupos muy variados, si bien la alternativa del PSOE se estaba constituyendo como la más fuerte.
Comunistas. Se agrupan en el PCE entre cuyos dirigentes destaca Santiago Carrillo. Defienden la reconciliación nacional.
Grupos nacionalistas. En el País Vasco subsiste el PNV con un gobierno en el exilio. A partir de 1962 algunos jóvenes se distancian por considerarlo demasiado moderado y fundan ETA, iniciando la “lucha armada” contra el Estado español. Comienza así una espiral de violencia que se prolongaría durante el franquismo hasta nuestros días.
En Cataluña crecen movimientos nacionalistas de diferentes tendencias (comunistas, democristianos, republicanos…)

LA CRISIS FINAL  DEL RÉGIMEN AUTORITARIO (1971-1975)

En esta etapa se evidencia que el franquismo ya no tenía fuerzas para lograr la sustitución del régimen, lastrado por una desunión de los grupos dirigentes y una difícil situación internacional (Crisis del petróleo de 1973).
Entre 1969 y 1975 se sucedieron problemas cada vez más profundos. En el 69 el caso Matesa salta a la opinión pública. Era una empresa textil que se había beneficiado de importantes créditos oficiales invertidos de forma poco clara. Saltó el escándalo aireado por la prensa. Franco tuvo que reestructurar el gobierno y destituyó a Manuel Fraga como ministro de Información. También aprovechó para recortar libertades sindicales. Se forma así un gobierno con amplia presencia de militantes del Opus Dei con Carrero como hombre fuerte ante la frágil salud del dictador. Parece que era el elegido para continuar con el régimen dejando escaso margen a Juan Carlos de Borbón y apartando a aquellos que habían manifestado un aperturismo. Pero su atentado a manos de ETA en Diciembre de 1973 acabó con estos planes. Tras esto accede al poder Arias Navarro, sin embargo la conflictividad era muy importante ante las muestras de debilidad de un régimen agotado. Se trató de conceder libertades políticas que permitiesen legalizar algunos partidos, pero ya era demasiado tarde. La oposición no aceptaría otra salida que no fuese la democracia. Los sindicatos reclamaban el derecho a huelga y en el país aumentaba la agitación estudiantil, obrera, en la prensa e incluso en el ejército (aunque minoritaria). También crecen los atentados de ETA a los que hay que unir los grupos terroristas de extrema izquierda como los GRAPO.
La respuesta de un gobierno superado por las circunstancias fue la represión. Se declara en varias veces el estado de excepción que suponía la suspensión de las garantías que ofrecía el fuero de los españoles y se volvía a imponer la censura informativa. Se abrieron multitud de sumarios por actividades políticas o sindicales. Se dictó la pena de muerte contra militantes de ETA (proceso de Burgos) suspendidas por la presión internacional algo que no ocurrió contra aquellos que participaron en asesinatos contra policías o guardias civiles (ejecuciones de 1975).
Ante este panorama se consolida una oposición moderada que ofrecía alternativas futuras en partidos políticos similares a los de Europa. Los más activos son:
Movimientos centristas, formados por personalidades provenientes del franquismo que rompen decididamente con el régimen acercándose a la democracia cristiana. Sin embargo su incapacidad para crear un partido único les restó influencia en el periodo posterior.
Socialistas, La dirección que hasta ese momento estaba en manos de miembros en el exilio, pasa a manos de jóvenes militantes en el interior. Entre ellos destaca Felipe González y Nicolás Redondo. El primero será elegido secretario general en 1974 en el congreso de Suresnes.
Comunistas, en torno al PCE continuó siendo ilegal. Su lider Carrillo tendió hacia la moderación ideológica lo que fue visto por algunos observadores como un referente futuro en la izquierda (algo que no se cumpliría tras la legalización del partido)
Nacionalismos, destaca la fundación en Cataluña de Convergencia Democrática liderada por Jordi Pujol que se consolidaría como futura fuerza nacionalista.

CONCLUSIÓN

La desunión de la oposición comienza a cambiar a medida que se acercaba la muerte del dictador. Se empezaron a crear diferentes plataformas con participación de estos partidos que no excluían una futura colaboración. Con la muerte de Franco comenzará una operación para implantar la democracia. Se cerraba así un largo periodo de casi 40 años.

En resumen es el fin de un periodo histórico iniciado por la Guerra Civil que supuso primero el intento de construcción de un estado fascista, luego un régimen autoritario sostenido por el prestigio de una sola persona, pero a medida que se promovía el desarrollo económico y la evolución social, iba poniendo más de manifiesto su carácter anacrónico frente a una Europa democrática.

martes, 5 de junio de 2012

PRACTICAR CON LOS TEXTOS

Os dejo un enlace donde podréis encontrar una serie de textos para repasar el temario de Historia de España. Iré subiendo mejoras para facilitaros esta recta final hasta selectividad. Mucha suerte y ánimos: